Me siento cansada, pero de ese cansancio que viene del esfuerzo, el trabajo, la labor y por eso estoy muy contenta y satisfecha. Ya es tarde, pero no quiero dejar de mostrarles la segunda muñequita. Ésta es pequeñita, en comparación con la muñeca azul y la cosí a mano casi por completo. La terminé en el momento adecuado y ya va en camino a su dueña!
La primera foto que ven aquí, la tomó mi hijo! Sin ayuda de ninguna clase, así que es la mejor para mí!
Mis días han estado bastante agitados y aunque algunas noches no he descansado como quisiera por energías en el aire, porque mi peque se despierta varias veces o por lo que sea, mi ánimo está al 100 porque me siento útil y creativa, aunque a veces termine haciendo la mitad de lo que me propongo y tenga demasiado en el tintero y me la pase intentando balancear exitosamente (y manteniendo la paz y la cordura) la crianza amorosa, creativa y atenta de mi hijo, la alimentación sana, el matrimonio armonioso, las amistades fluyendo y creciendo, las lecturas al día, la casa tolerablemente (des)ordenada, la cercanía familiar, el alma en apertura al aprendizaje, el corazón fresco y palpitante, los ojos curiosos y ávidos, el discernimiento reflexivo pero no altivo y el enlace con mi cuerpo firme y fluyente...
De pronto se me caen las esferas de las manos, pero la vida es esa búsqueda nunca resuelta, el camino es lo único y al fin que yo disfruto caminar!
Sonrío, porque la vida es buena y bella para mí hoy y agradezco cada día esta bendición.
¡Gracias!
